Néstor no es un hombre "de ideas", como llamaríamos a un intelectual. Néstor tampoco es un hombre de muchas ideas. No. Néstor es un hombre de unas pocas ideas, grabadas a fuego. Concentrar el poder. Exigir obediencia ciega. Asegurar la caja para comprar lo que sea. Y, fundamentalmente, "controlar la calle".
Esta idea de Néstor, después de cuatro años y medio de entrenamiento, se vio hoy reflejada en Plaza de Mayo. Sus grupos de choque fueron a desalojar a los manifestantes que, haciendo sonar sus cacerolas, protestaban contra la intransigencia del gobierno.
La Presidenta, con su habitual pose tilinga (perdón por la antigualla, pero esta gente atrasa medio siglo), tuvo el tupé de hablar de “piquetes de la abundancia”, mientras apretaba su Louis Vuitton. En su lógica maniquea, a los K no les entra en la cabeza que “el campo” ya no es “la oligarquía vacuna”. Que la Rural, a lo sumo, se agrega a la protesta, pero que ésta la motorizan los productores más chicos, que se ven confiscados. Los otros siempre tienen alguna salida.
Y aquí una perlita del inaguantable discurso: “el IVA lo pagan todos, hasta los desocupados cuando van a comprar la leche o un kilo de pan". Y si esto es así, que es así, ¿por qué no se preocuparon de bajar el IVA, impuesto regresivo si los hay, para favorecer a los más pobres? Porque aquí aparece la obsesión de Néstor por la caja. Hay que “hacer caja” para comprar lo que sea menester: medios, opositores, piqueteros, gobernadores, partidos.
Ante tan cerrada visión de “o están conmigo o están contra mí” estalló de rabia el campo. Y estalló de rabia la ciudad. Miles de manifestantes en todo el país salieron a protestar con sus cacerolas.
Y aquí apareció LA idea de Néstor. Las manifestaciones opositoras se disuelven, aunque sea a los golpes. Ya estaban en Entre Ríos los camioneros-cadeneros de Moyano. Y aquí aparecieron los piqueteros-patoteros de D’Elía para correr a los que estaban en la Plaza de Mayo.
Pero Néstor tiene un problema. ¿Alguien vio alguna vez al mismo tiempo a Batman y a Bruno Díaz, o al Zorro y a Diego de la Vega? Imposible. Pues bien. Como D’Elía no se puede replicar, si está en la Plaza de Mayo, la gente de allí desalojada irá al Obelisco, o a Olivos, o a cualquier otro lugar. Y otros miles seguirán llegando al Monumento a la Bandera o a las plazas de Tucumán, o a Nueva Córdoba.
Menudo lío, ¿no, Néstor? Menudo lío tener pocas ideas y muchos prejuicios.
miércoles, 26 de marzo de 2008
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1 comentario:
Gracias, Reinaldo. Agregar algo a tu comentario, seria faltarte el respeto, por eso, de nuevo, gracias.
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