Hay palabras que se ponen de moda. Hoy es la efedrina.
Reconozco mi ignorancia. Hasta hace un par de semanas, para mí esa palabra remitía a gotas nasales y al doping de Diego en el Mundial de Estados Unidos.
Ahora, me enteré de que la efedrina es el "precursor" (otra palabrita de moda) para producir "drogas de diseño" (otra más), como éxtasis y metanfetamina.
Creo que mi ignorancia y la de la mayoría está disculpada. No teníamos por qué saberlo.
Pero ¿y las autoridades? Resulta que ellos también se enteraron ahora. Viendo la conferencia de prensa de los ministros de Salud y de Justicia y Seguridad y del secretario de la droga uno no puede menos que preguntarse: si lo sabían ¿cómo actúan recién ahora?
Tengo la mejor opinión de Graciela Ocaña. No tanto de Aníbal Fernández y del "Bochi" Granero, quien siendo dentista, está a cargo de la secretaría de la droga.
En cualquier caso, ellos o sus asesores, ¿recién ahora se enteran que con efedrina se hacen "drogas de diseño"? ¿Nadie se dio cuenta hasta que mataron a tres tipos que se estaba importando una cantidad exorbitante de ese "precursor químico", mucha más que la necesaria para la industria farmacéutica?
¿Nadie va a renunciar? ¿Tampoco el ex operador de radio Héctor Cappaccioli, que se convirtió en Superintendente de Salud y recaudador de las campañas kirchneristas?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario